Un estudio realizado por la Universidad de Indiana mostró que el glifosato y el embarazo no se combinan. El 99% de mujeres embarazadas de su grupo de muestra tenían indicios de glifosato en su orina. Según la Universidad de Cambridge, el glifosato es el pesticida más consumido en todo el mundo, y este pesticida podrían estar causando nacimientos prematuros.
Varios estudios con respecto a los efectos prenatales de glifosato han alcanzado una conclusión compartida. Aparte de un mayor riesgo de cáncer,la exposición al glifosato durante el embarazo incrementa el riesgo de padecer un nacimiento prematuro.
Aproximadamente 1 millón de bebés se mueren todos los años como consecuencia de las complicaciones de los partos prematuros. Los sobrevivientes de las complicaciones prematuros suelen enfrentar una vida entera de discapacidades médicas.
“El glifosato se encuentra más comúnmente en Roundup, uno de los herbicidas más utilizados en el mundo.
El Estudio de Glifosato y El Embarazo del 2022
Un estudio, llamado “La exposición al glifosato en las primeras etapas del embarazo y la reducción del crecimiento fetal” (“Glyphosate exposure in early pregnancy and reduced fetal growth),” se llevó a cabo por la Universidad de Indiana. Halló que los rasgos de glifosato en la orina se han incrementado del 93% al 99% desde su último estudio a pequeña escala en 2018.
Durante varios años, las muestras de orina del primer trimestre se obtuvieron aleatoriamente de mujeres que enfrentaban un alto riesgo de exposición al glifosato. El estudio analizó el incremento de la ingresos a las unidades de cuidados intensivos neonatales y un cambio en el peso al nacer ajustado.
El estudio mostró que 186 de 187 mujeres demostraron niveles de glifosato en la orina por encima del límite de detección. También se mostró que el percentil del peso de nacimiento de los recién nacidos estaban relacionados negativamente con el glifosato. Las mujeres que vivían en las partes más rurales de Indiana, donde los pesticidas se usan a menudo, tenían bebés en percentiles más bajos de peso de nacimiento.
El principal autor del estudio, Paul Winchester, neonatólogo, mencionó que, “La exposición de pesticidas durante el embarazo, especialmente en las primeras etapas del embarazo, puede grabar ADN y alterar la expresión del gen. Pero se sabe muy poco del cómo estos productos químicos pueden tener un impacto en el desarrollo fetal de los seres humanos.”
Winchester también habló de la cantidad de estudios anteriores que han identificado los efectos negativos causados por la exposición al glifosato. Sin embargo, como indican muchos de estos estudios, se conoce muy poco sobre su efecto general en los seres humanos.
El estudio realizado por Winchester fue de pequeña escala y con menos de 200 participantes. Otros estudios de pequeña escala han sacado conclusiones parecidas con respecto al glifosato. No está claro si se deben llevar a cabo investigaciones más expansivas para solidar el vínculo entre los nacimientos prematuros y el herbicida más común del mundo.
“La falta continua de evidencia más rica y diversa sobre los posibles efectos sanitarios de los pesticidas es problemático,” dice Manolis Kogevinas de Environmental Health Perspectives (Perspectivas de Salud Ambiental). El razonamiento por la carencia de investigaciones es la complicada situación regulatoria y legal en que el glifosato se encuentra.
Roundup, Monsanto y Cáncer
El glifosato, como se mencionó anteriormente, se vende como herbicida Roundup. Se produce por Monsanto, que hizo unas de sus primeras ganancias al producir Agent Orange, responsable por matar a miles y miles de personas en la Guerra de Vietnam.
El magnate farmacéutico Bayer compró Monsanto en 2018. Las formas de catálogo componen alrededor de la mitad las ganancias de Monsanto.
La Agencia de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés) cambió el estatus del glifosato a probablemente no canceroso en 2016, cuando la administración presidencial entrante designó a lideres amigables a las corporaciones para lidiar la EPA. La inmensa precedencia jurídica, sin embargo, disienta ese estatus.
Una corte de apelaciones opinó en 2022 que el proceso de clasificar el glifosato como seguro había sido poco detallado. Indicó correos electrónicos amistosos entre ejecutivos de Monsanto y los responsables políticos de la EPA. La corte recomendó que la EPA revisara la aprobación de la clasificación y que proporcionara una examinación más rigorosa de los hechos científicos.
La Universidad de Washington sí sostiene que el glifosato es un tipo de carcinógeno y puede incrementar seriamente la probabilidad de padecer linfoma no Hodkin. En 2007, un hombre de California fue diagnosticado con este cáncer particular. Él culpó a Monsanto, sosteniendo que durante las décadas en que fumigaba su terreno de cinco acres, él nunca vio o recibió ningún tipo de advertencia sobre Roundup.
Desde de que el Organismo Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer determinó en 2015 que el glifosato es en cancerígeno, miles y miles de demandantes han presentado demandas contra Monsanto. Todos afirman que el Roundup fue su causante de cáncer. Ahora existen decenas de miles de demandas pendientes contra Bayer-Monsanto presentados por demandantes que sostienen que su cáncer fue causado por Roundup.
