Las autoridades aeroportuarias y de aviación de todo el país han empezado a reconocer que la espuma contra incendios que la FAA exige que se utilice en los entrenamientos habituales de las instalaciones aeroportuarias les está causando un tremendo perjuicio medioambiental y financiero.
OnderLaw representa a aeropuertos que interponen demandas contra fabricantes de espuma contra incendios, acusándoles de negligencia al lucrarse con la venta de espuma acuosa formadora de película, o AFFF, un producto que ha contaminado innumerables aeropuertos y sus terrenos circundantes con sustancias químicas nocivas.
Estas espumas contienen PFAS, también conocidas como “sustancias químicas para siempre” porque no se descomponen bien, ni siquiera con el paso de mucho tiempo. Envenenan las aguas subterráneas y el suelo, se acumulan con el tiempo y enferman a las personas que los ingieren.
Las autoridades aeroportuarias deben pagar enormes cantidades de dinero para mitigar esta contaminación. FrazerOnder Environmental Law está ayudando a los aeropuertos a cubrir sus pérdidas y obligar a las empresas que se benefician de la espuma antiincendios a pagar daños y perjuicios.
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